La consultoría como actividad enmarcada en el accionar de las instituciones de I+D se ubica dentro de la categoría de servicios de "extensión"; o servicios basados casi exclusivamente en conocimiento, dentro de los cuales podemos identificar algunas categorías:
1. Consultorías "en sentido estricto": servicios profesionales, orientados que con base en la adaptación e implementación de tecnologías y/o metodologías; determinan una ruta de intervención en una organización o sistema a fin de mejorar el desempeño en temas normalmente delimitados.
2. Asesorías: constituyen orientaciones, conceptos o recomendaciones; que se brindan a un tercero, siendo este último el responsable de la implementación y/o decisión. La labor de asesoría se establece normalmente en el marco de un proyecto y/o como parte de un plan de trabajo definido en un horizonte de tiempo.
3. Conceptos técnicos, peritaje y avalúos: emisión de conceptos o dictámenes de tipo técnico; estos se circunscriben a situaciones puntuales, y normalmente se centran en los hechos y no en las causas de la situación a valorar. Este tipo de servicios se basan en el conocimiento, experiencia e idoneidad de quien los emite.
La anterior es tan solo una forma de clasificar este tipo de servicios, desde luego pueden existir otras; de forma particular la consultoría vinculada a procesos de gestión de I+D+i adquiere unos matices muy particulares, al punto que tiene diversas barreras de entrada para quienes deciden desarrollar esta actividad.
MATERIAL COMPLEMENTARIO - (este material permite generar un complemento a los temas y conceptos tratados en la sesión)
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